Buenas noticias para quienes gustan de este platillo mexicano. Ayer fui con un grupo de amigos (Héctor, se te extrañó) al Café Azul y Oro ubicado en el Espacio Cultural de la UNAM, frente a la Sala Nezahualcóyotl y ví que ya hay Chiles en Nogada. Para quienes nunca han ido, les cuento:
El lugar tiene sus pros y sus contras, debo señalar. La comida es maravillosa. En serio, es buenísima. La presentación de los platillos es excepcional, aunque, si les gusta cómo se ve, esperen a probar lo que pidieron. "La pechuga de pato también está muy buena. Tiene dulce y salado al mismo tiempo", me comenta Abraham mientras pienso en que Pilar nos decía, insistentemente que "Teníamos que probar el pastel de Chocolate Belga". Recomiendo particularmente la ensalada de manzana verde y queso de cabra o la de pera y queso roquefort. Ambas son riquísimas. También hay una buena selección de pastas y carnes. . Además hacen festivales temáticos por temporadas. El chocolate oaxaqueño también es muy bueno, no importa si lo piden hecho con leche o con agua. No dejen de probar los postres. A mí me gusta mucho el mousse de mamey y, en especial, el pay de queso. Hay dos secciones, arriba y adentro o abajo y afuera. Esto se traduce en buenas noticias para los fumadores y los amantes del sol y el aire libre.
En cuanto a los contras, el servicio es raro. En general los meseros son medio impacientes pero no te dejan abandonado a tu suerte ni te presionan para que pidas lo más caro de la carta. No es exactamente malo, pero tampoco te hacen sentir particularmente cómodo al principio. Hay un detalle que sí me molesta mucho: Sólo trabajan con pepsi. ¡Detesto la pepsi! Claro que, si de plano no les entra el refresco, hay agua de sabores y jugos "orgánicos" (de naranja y manzana). Otro detalle: no venden bebidas alcohólicas sí que olvídense de acompañar su platillo con una copa de vino.
Siempre es importante hablar sobre los precios. Es cierto que en el Café Azul y Oro se paga más que otros lugares dentro de la UNAM, pero no por eso caro, al contrario. Ir a este lugar garantiza que uno podrá comer muy bien por un precio justo. El costo por platillo está por debajo de los 100 pesos. El costo de una comida completa (incluyendo postre y café para una larga sobremesa) oscila entre los 120 y 200 pesos por persona.
Si nunca han visitado el Café Azul y Oro (2 sucursales: junto a la sala Neza o en la torre de Ingeniería), ahora es cuando. A lo largo del mes patrio estarán ofreciendo tres tipos diferentes de Chiles en Nogada: dulces, salados y combinados. Aprovechen los últimos días de sol y calorcito y siéntense en la terraza o bien, refúgiense de la lluvia tomando un chocolate caliente en el piso superior.
"El café Azul y Oro es una isla en medio de las artes[...]¿Qué no hay musa para la comida? No hace falta. Todas están ahí representadas: en la danza inmóvil de la ensalada o los ravioles, en la música de la vajilla y los cubiertos, en la historia de la cocina mexicana, en la poesía de los sabores, en la comedia de las pastas, en la tragedia de probar el último bocado." (Los sabores escondidos de la ciudad de méxico. Pueden leer más aquí)
Provecho,
V.
3 comentarios:
Suena de maravilla, es increíble que llevo años en la unam (como 7) y nunca he ido al Azul y Oro. Espero poder ir pronto y probar la comida.
Saludos
Yo también los extrañeeeeé
Llévenme de nuevo plis plis plis
¡Sí! ¡E invítenme a mí también! Los extraño...
Publicar un comentario